Los rayos del sol son uno de los principales enemigos de la pintura de tu coche. Sus efectos nocivos terminarán por obligarte a pasar por tu taller de chapa y pintura en Torrelavega si quieres que luzca como cuando lo sacaste del concesionario.

La radiación ultravioleta, el calor en general y todos los agentes climáticos derivados de los mismos, afectan a la pintura de los vehículos, haciendo perder su brillo y resplandor. De esta forma, la carrocería se convierte en una chapa de mal aspecto y opaca.

En tu taller de chapa y pintura en Torrelavega, no obstante, realizarán a tu coche tratamientos como la cataforesis o la aplicación de productos anticorrosivos para que los efectos nocivos del sol tarden más en hacer daño a las láminas. Son habituales estos tratamientos en los coches de nueva generación, donde la base de su pintura se compone de resinas de poliéster que necesitan una capa adicional de barniz.

Dicho barniz, poliuretano usado en horneable o repintado, es el que se encarga de la protección de la pintura, ya que está formulado químicamente con filtros de luz aditivos que impiden el paso de los rayos UV y evitan la pérdida de brillo y el matizado.

Algunos colores son más sensibles al efecto nocivo del sol que otros. Los rojos y blancos, por ejemplo, absorben un alto porcentaje de luz, lo que los convierten en más susceptibles. El calor afecta a los procesos de lavado, pulido y abrillantado, debido a que el sol calienta la chapa y acelera el secado de los productos utilizados, dificultando su eliminación y afectando a su resultado final. De ahí que tengan que llevarse a cabo en lugares protegidos.

Si tu coche luce una imagen deteriorada y necesitas darle un lavado de cara para eliminar los efectos del sol en su pintura, en Talleres Fergar encontrarás profesionales que te lo dejarán como nuevo.