No vamos a entrar en el debate de si es mejor un coche de motor gasolina o de diésel, porque las variantes para elegir entre uno y otro son muy diversas. Lo que tenemos claro en los talleres de reparación de coches en Cabezón de la Sal es que hoy día son mayoritarios los vehículos con motor diésel, a pesar de que con los años se ha comprobado que ese aura de irrompibles que tenían hace años se ha desvanecido conforme se han aumentado las prestaciones de los mismos.

En Talleres Fergar hemos comprobado que cada vez con más asiduidad tenemos clientes con problemas en los motores diésel de sus coches, algo que hace años parecía impensable, en parte debido a que son sistemas mucho más complejos que al principio de su creación, lo que aumenta las probabilidades de pequeñas averías y también más importantes, pero también provocadas por los malos hábitos de conducción de muchos conductores, algunos de ellos que incluso se desconocen.

Entre los elementos que más averías sufren los coches de motores diésel podemos encontrar el turbocompresor, seguido del filtro antipartículas, el caudalímetro y, por último, la válvula EGR. Estos cuatro elementos copan la mayoría de problemas técnicos que tenemos que solventar en los talleres de reparación de coches en Cabezón de la Sal, todos ellos, a excepción del caudalímetro, con el punto en común del escape de los gases como origen. Ello se debe a que el ciclo de combustión del diésel genera un residuo en forma de partículas sólidas carbonosas, conocido en el sector como carbonilla, que es el origen de muchos de los males de este tipo de motores.