Las lunas de los vehículos son muy resistentes. Sin embargo, el golpe de una pequeña piedra mientras circulamos a gran velocidad puede provocar una grieta importante que haga necesario un cambio del cristal. Para ello hay que acudir a expertos en la reparación de lunas de automóvil y en Torrelavega puedes acercarte a nuestro taller para que te ayudemos.

En función de la grieta puede ser necesario realizar un cambio total de la luna, o se puede solucionar de otro modo, con una pequeña reparación. No obstante, para llevar a cabo esa reparación es necesario que se cumplan una serie de requisitos.

Si no queremos hacer un cambio del cristal, el impacto del parabrisas debe tener un tamaño inferior a unos 40 milímetros de diámetro, aproximadamente. Además, el cráter del agujero debe ser inferior a 5 milímetros. Por supuesto, el parabrisas no puede tener rajas o fisuras que superen los 50 milímetros o que tengan su origen en el borde del propio parabrisas.

Esa rotura no debe estar en la zona de visión directa del conductor, que se estima por donde pasa el limpiaparabrisas. Tampoco pueden afectar los daños a la lámina que se localiza en el interior del cristal. En los casos en los que haya roturas múltiples con cráteres a distancias inferiores a 10 milímetros, no podrán ser reparados.

En cualquier caso, lo más aconsejable es llevar el vehículo a un taller que esté especializado en los trabajos de reparación de lunas de automóvil y en Torrelavega el nuestro es uno de ellos.

Para cualquier rotura en un cristal de tu coche solo tienes que acercarte a Talleres Fergar.